Esto no es una crónica, es una declaración de sentimientos

Todo aquello que sentimos cuando podemos experimentar aquello por lo que nos estábamos desviviendo. Una de las sensaciones por las que todos rogamos más tiempo para seguir disfrutando de ellas. Y que me perdona quien sea por ponerme sentimental en un texto de este tipo, pero, a veces, es mejor declarar los sentimientos que hacer una crónica de los hechos.

Aunque pueda ser señalado como un ataque a ambos flancos, lo cierto es que un servidor relata lo que ve y escribe lo que siente. Y el multipartidazo de anoche, con la liga en juego, fue un ejemplo perfecto para sacar a relucir esa postura. Chringuito - Cádiz y eFitners - Heads UP. Partidos que concluyeron, mejor o peor, pero que sirvieron para seguir estirando la emoción de lo que aún desconocemos.

El nerviosismo era palpable. Nadie había presagiado un final de liga tan abierto, ni siquiera los dos equipos involucrados en la lucha por el título. Razón y sentimientos siempre aparecen como ejemplo equidistancia. Pero, llegados a este punto, la única razón por la que muchos siguen aquí es para ver quien muestra sus sentimientos de la forma más convincente: El Chiringuito o Heads UP.

Penúltima jornada de liga y todo por decidir. Tocaba cumplir con el cometido con un ojo puesto lejos de todo aquello que puedes controlar. Control fue lo caracterizó el primer tiempo del encuentro entre El Chiringuito y el Cádiz. Sin ocasiones claras de gol, la atención se la llevaba el dinamismo del eFitners - Heads UP. Aquí todo parecía más expresivo, como el lanzamiento al palo de SirRobben a los 40 minutos de juego.

La declaración de intenciones de Heads UP acabó convirtiéndose en una celebración a grito pelado a modo de canto a la vida. Y en ese momento, un canto al liderato. En el 63, Jamadi la templó al segundo palo y The Animal la embocó con una potente volea. Pero, a veces, los sentimientos no son correspondidos. Raúl Rodríguez se empeñó en ponerle las cosas complicadas cinco minutos después del gol de los simios.

Mientras unos vivían con expectación lo que sucedía en el duelo entre el líder y el Cádiz, Heads UP se mostraba contrariado por el revés. Más aún cuando en la última jugada del encuentro, Leo recogía un rechace y hacía el 2-1.

Por si la emoción no fuera máxima, la casualidad nos brindó un momento de éxtasis. A la par que Leo sentenciaba a Heads UP, Bastos ponía por delante a El Chiringuito. En este preciso instante, los de Galloso ya estaban fantaseando con levantar el título de liga. No obstante, como la ruleta de los sentimientos no tenía intención de parar, el Cádiz empataba el encuentro en la jugada siguiente. Joseca irrumpió en el área y sacó un disparo potente imparable para Torres.

Todavía se pudo subir un peldaño más en la escala del placer. En la última jugada del encuentro, Irubat se metió en el área y, entre trompicones, el balón acabó dentro de la portería defendida por Vistor. El árbitro se mostró diligente en su tarea de racionar los sentimientos y anuló la jugada para que el último partido de liga sea el que decida el campeón de esta octava temporada de VFO.

|En pro del sentimiento| Leo, Joseca e Irubat. Tres nombres propios que hicieron suya la expresión “¡Ojalá esto durase más!”

Manu 'Leitor' Rodríguez